El mecanizado de metales se refiere al proceso de utilizar varias máquinas y herramientas para cortar, taladrar, fresar, tornear, rectificar y realizar otras operaciones en materiales metálicos. Estas técnicas de mecanizado se pueden utilizar para varios tipos de materiales metálicos, incluyendo acero, aluminio, cobre, latón, níquel, tungsteno y más.
En muchas industrias diferentes, incluyendo la automotriz, aeroespacial, médica, de construcción, electrónica y más, el mecanizado de metales desempeña un papel vital. El mecanizado de metales hace posible la fabricación de varias piezas y componentes, que luego se integran en los complejos sistemas mecánicos y equipos que vemos hoy en día.
Algunos tipos comunes de técnicas de mecanizado en el mecanizado de metales incluyen:
Perforación: Utilizando una broca para perforar agujeros en la pieza de trabajo metálica. Esta técnica se puede utilizar para la fabricación de roscas, la instalación de sujetadores y aplicaciones de perforación.
Fresado: Utilizando una fresa para rotar y cortar en la superficie de la pieza de trabajo metálica. Esta técnica se puede utilizar para aplanar superficies, crear ranuras y hacer contornos complejos.
Torneado: Utilizando una herramienta de torno para cortar en la pieza de trabajo metálica para producir una superficie giratoria. Esta técnica se puede utilizar para la fabricación de roscas, diámetro exterior, diámetro interior, superficies cilíndricas y más.
Rectificado: Utilizando una rueda de rectificado para rectificar la pieza de trabajo metálica para lograr un alto nivel de precisión y suavidad. Esta técnica se puede utilizar para la fabricación de piezas y componentes de alta precisión.
En el mecanizado de metales, se requieren varias herramientas y equipos, como brocas, fresas, herramientas de torno, ruedas de rectificado, machos de roscar y más. Estas herramientas y equipos deben ser fabricados y ajustados con precisión para lograr resultados de mecanizado altamente precisos. El proceso de mecanizado también requiere cálculos y análisis complejos para garantizar la precisión y seguridad durante la operación de mecanizado. Por ejemplo, factores como las fuerzas de corte, la velocidad de mecanizado, la selección de herramientas y más deben considerarse para evitar problemas como el sobrecalentamiento y el daño de herramientas durante el proceso de mecanizado.